Torrijas de calabaza con rodajas de plátano

Será que el otoño no acaba de llegar, pero estoy obsesionada con la calabaza. Casi TODAS las recetas que se me ocurren son con calabaza. Hoy te traigo una receta de desayuno o de snacks, para hacer si quieres este finde, de torrijas de calabaza y canela, o como las llamo yo Pain Perdu.
De toda la vida, el Pain Perdu se hace con pan de algunos días, siempre mejor. En este caso, hacemos una mezcla con puré de calabaza, huevos, leche vegetal y canela para remojar el pan.

Puedes, si quieres, preparar la «mezcla» el día antes y llevarla a temperatura ambiente antes de usar. Sirve con fruta de temporada y yogur, es un desayuno diferentes 😉

La vajilla que he usado es un regalo de esta maravillosa marca sueca CINK. Se trata de vajillas para niños (o no) de bambú orgánico reciclado a partir de los desechos creados en la producción de bambú. Mezclado con almidón de maíz sin OGM y un aglutinante de melamina de grado alimenticio 100%. Con un estilo muy nórdico que tanto me gusta, se puede poner en el lavavajilla.

Torrijas de calabaza y canela

Para 5 rebanadas

2 huevos
1/2 cup / 115 g de puré de calabaza (ver aquí para hacer el puré de calabaza)
1 cuchara de sirope de arce
1/2 cucharadita de sal
1 cucharadita de canela
3/4 cup / 180 ml de bebida de avena

Servir con

rodajas de plátano
un poco de sirope de arce
polen (opcional)

En una molde rectangular (tipo para pasteles) bate los huevos con el puré de calabaza, sirope de arce, sal, canela y leche vegetal.
Calienta una sartén con un poco de mantequilla orgánica y/o aceite de coco. Remoja una rebanada de pan en la «crema», en ambos lados. Presiona de cada lado, para que el pan absorba bien. Luego deja que el exceso gotee. Cocina el pan durante 4 minutos de cada lado.
Sirve con rodajas de plátano, sirope de arce, polen y yogur si quieres.

Si te sobra, puedes cortarlos en cuadraditos, y los niños pueden remojar en yogur con fruta.